El Danubio en bici (12ª etapa)

Saliendo de Grein

El Danubio en bici
(Un cicloviaje pasado por agua)

Carretera cortada por las inundaciones

Todas las carreteras junto al Danubio están cortadas

12ª Etapa – Día 2 de junio de 2013
Grein – Melk (en bici 67,00km)
Melk – Krems (en tren)

Cascada de agua en Sankt Nicola

Poblaciones por las que paso:
Sankt Nicola a. d. Donau (o.t.)
Sarmingstein
Hirschneau
Persenbeug (o.y.)
Ibbs a. d. Donau (o.t. – cámping Zur Alm)
Marbach a. d. Donau (o.t. – camping Marbach)
Pöchlarn (purnte) (o.t. – camping Naturfreunde Bootshaus)
Melk (o.t. – albergue juvenile – camping Melker Färhaus)
Emmersdof a. d. Donau (o.t. – camping Donau)
Grimsing
Aggbach Markt (o.t.)
Groisbach (o.t.)
Willendorf in der Wachau (o.t.)
Schwallenbach
Dürnstein (o.t.)
Krems (0.t. – albergue juvenil – cámping Donaulände)

Capillita en Hirschneau

Como de costumbre a las siete y poco ya estoy en pie, lo primero que hago es mirar por la ventana, y BINGO!!! Está lloviendo.

El Danubio a su paso por Ibbs

Organizamos las alforjas y bajamos a desayunar, que como siempre que está incluido, nos ponemos como “el Quico”.

Carril bici inundado en la salida de Ibbs

Antes de emprender la etapa revisamos las bicis, sobre todo aceitamos la cadena, nos ponemos el equipo de lluvia y empezamos a pedalear lo más cerca posible del Danubio ya que en la población está cortado el carril que acompaña al río, nosotros seguimos por la carretera que va paralela al carril bici, ya que este está inundado, incluso en esta carretera está prohibida la circulación para las bicicletas, aunque nosotros seguimos pedaleando.

Ibbs

Esto es un trasiego de coches del ejército, de bomberos y de un montón de gente que no paran de poner vallas y sacos terreros para contener la crecida del Danubio.

Imposible seguir pedaleando

Vemos a la gente sacando muebles y todo tipo de enseres de sus casas y de los bajos comerciales.

Buscando un camino por donde seguir

Como podemos y saltándonos todas las prohibiciones llegamos a Ibbs y en la Oficina de Turismo me dicen que el carril bici del Danubio está cortado, cosa que comprobamos nada más empezar a pedalear.

Imposible llegar por el carril bici a Melk

Después de intentar en varias ocasiones seguir la ruta, tenemos que desistir y cómo podemos enlazamos con la carretera nacional B1, (carretera con muchísimo tráfico y sin arcén), y para más “inri” está cayendo agua a mares.

Entramos a melk

En una gasolinera de Pöchlarn tenemos que parar porque la lluvia no nos deja ni pedalear y estamos totalmente agotados, aprovechamos para secarnos un poco, reponer fuerzas a base de bocata con cerveza y después de descansar un rato sacamos fuerzas y seguimos pedaleando.

Protegiendo las casas con sacos terreros y tableros de madera

Desde aquí hasta Melk nos separan unos 10 kilómetros horrorosos, cuando nos quedan 3 para llegar, y hartos de ir por la carretera con tanto coche y empapados de agua, intentamos seguir la ruta pero es imposible, no tenemos más remedio que seguir por la carretera B1.

Sacos terreros preparados para ser usados

Por fin llegamos a Melk donde vemos el mismo movimiento que en todos los pueblos anteriores por los que hemos pasando: el ejército y los bomberos cortando calles con grandes vallas, la población colocando sacos terreros en sus casas y locales comerciales.

Bomberos cortando calles. Melk

Nosotros bajo un manto de agua recorremos la población y vemos la Abadía Benedictina y el Ayuntamiento, como el horno no está para bollos, nos dirigimos a la Oficina de turismo a preguntar si podemos seguir con nuestra ruta, me dicen que ni de broma, que el carril bici del Danubio está inundado, yo le insisto y le pregunto si podemos seguir por la carretera B1 y me dice que está cortada, que la única forma de seguir es en tren, me indican en un plano donde está la estación y nos acercamos a preguntar por la salida del tren a Krems; dentro de 20 minutos sale uno pero tenemos que hacer transbordo en St. Pölten, desde aquí hasta Krems después de casi tres horas de tren.

Melk

En Krems el panorama es muy parecido al ya visto: bomberos, ejército, todo el mundo de un sitio a otro, vallas, sacos terreros…, buscamos la Oficina de Turismo y cuando la encontramos está cerrada, aunque en la puerta tienen un expositor con folletos que me viene muy bien para buscar alojamiento; después de ir a varios hoteles y pensiones en todos nos dicen que no tienen nada libre.
Por fin, después de mucho indagar, encontramos sitio en el albergue juvenil, relleno las fichas y ocupamos una habitación con 6 literas.

Abadía de melk

Tras organizar todo el equipaje que chorrea agua por todas partes nos duchamos y lavamos la ropa; como ya es muy tarde nos preparamos unos bocatas y cenamos.

Abadía de melk

Aprovechando que casi no llueve salimos a visitar la ciudad, aunque lo único que podemos ver es la preocupación de la gente por el desbordamiento del Danubio.

Abadía de melk

Da la impresión de estar viendo una película trágica sobre inundaciones, la ciudad parece que está tomada por el ejército, los bomberos y demás unidades especiales; en fin es una situación bastante preocupante.