El Danubio en bici (10ª etapa)

Donde se juntan los ríos. Passau

El Danubio en bici
(Un cicloviaje pasado por agua)

Una de tantas sirenas que vemos en el Danubio

10ª Etapa – Día 31 de mayo de 2013
Passau – Linz (95,62km)

Jardín en la salida de passau

Poblaciones por las que paso:
Erlau
Obernzell (o.t.)
Niederranna (o.t.)
Schögen (o.t. – camping Terrassencamping Donauschinge)
Kobling
Aschach a. d. Donau (o.y.)
Feldrkichen a. d. Donau o.y. – camping Puchner, Golfplatzstrasse)
Weidet
Ottenshein (o.t. – camping Hofmühle Höflein)
Linz (o.t. – albergues juveniles, cámpings)

El Danubio a su paso por Obernzell

Como ya es normal en esta ruta el agua es la protagonista, no ha dejado de llover en toda la noche.

Pedro ajustando el timbre en Niederranna

Bien temprano empezamos a recoger el equipaje y preparamos las alforjas, nos bajamos a desayunar, lo que hacemos como de costumbre, muy bien.

Cruzando el río en barca. Schlögen

Al estar lloviendo con bastante intensidad nos ponemos la ropa de lluvia y salimos pedaleando hasta cruzar los puentes del Danubio y del Ilz desde aquí por el carril bici de la margen izquierda que esta junto a la carretera, lo que significa que tenemos que ir soportando el intenso tráfico y el ruido ensordecedor de los coches.

Cruzando el río en barca. Schlögen

En Obernzell nos olvidamos de los coches y seguimos por camino llano y asfaltado que transita entre bosques hasta pasar por Jochenstein que es el último pueblo de Alemania, ya estamos en Austria.

Barca en el museo de la pesca. Aschach

Y no paramos hasta llegar a Niederranna donde lo hacemos en un bar a la orilla del río para tomar unas cervezas y algo de comer.

Cicloturistas entre Aschach y Feldrkichen

Hoy, y a pesar de la lluvia que está cayendo, estamos coincidiendo con muchos cicloturistas, mientras estamos sentados en el bar pasan un buen numero de ellos.

Castillo de Ottensheim

Después de reponer fuerzas seguimos pedaleando bajo un manto de agua que apenas me deja ver, pues las gafas se me calan de agua y como no llevan limpia parabrisas, no veo nada con ellas.

Castillo de Ottensheim

Desde aquí seguimos hasta Schlögen donde tenemos que abandonar esta margen del río y cruzarlo con la ayuda de una barcaza a la margen derecha, esta es la única forma posible de hacerlo, nos cobran por este servicio 1,5 euros por persona y bici, algo que me parece más que razonable.

Ottensheim

Continuamos con nuestro pedaleo bajo la lluvia y pasamos por Kobling, pequeña población que cruzamos sin parar y donde vemos un pequeño camping, desde aquí pedaleamos por una pequeña carretera hasta llegar a Aschach donde paramos en la Oficina de Turismo a solicitar información, aquí me pasa algo curioso y es que cuando entro con la ropa de lluvia y chorreando agua por todas partes, la señora de la oficina, en vez de molestarse, que hubiera sido lo normal si esto pasa en España, me sacó una toalla para que me secara y una vez seco me hizo sentar y me dio toda clase de información, y en español.

Castillo de Ottensheim

A la salida de la oficina hago unas fotos de la población, ya os podéis imaginar el desastre que es hacer fotos cuando está lloviendo.

Calle comercial. Linz

Seguimos con la etapa pedaleando y nos encontramos con un grupo de cicloturistas (algunos de ellos eran niños), paramos con ellos a charlar un rato, uno de ellos habla español porque su hijo estudia en Barcelona; aprovechamos para tomar unos frutos secos.

Fuente y columna de la trinidad

Después de este encuentro me lío con el trazado de la etapa y no cruzamos al otro margen del río, lo que hace que pasemos por otras poblaciones que no teníamos programadas, (poblaciones que tampoco podemos visitar por la cantidad de agua que nos está cayendo).

Catedral vieja. Linz

Al ir por este margen del río nos ahorramos unos cuantos kilómetros, pero también es verdad que los últimos son de infarto, por una carretera con muchísimo tráfico y donde los coches nos adelantan casi rozándonos y en alguna ocasión bañándonos con el agua de los charcos al pasar junto a nosotros.

Plaza Mayor y columna de la Trinidad

Por fin llegamos a Linz donde buscamos la Oficina de Turismo y me dan información de la ciudad en español, aquí nos buscan un alojamiento barato y céntrico, nos hacen la reserva y nos dirigimos en su busca.

Plaza Mayor. Linz

Ya en el apartamento vemos que es algo cutre, pero para “quien es el santo buena es la peana”.

Linz

Y lo de siempre: ducha, lavar ropa y luego salimos a comprar algo para la cena, después damos un paseo por la población, eso sí, bajo la lluvia, y nos vamos al apartamento a hacernos la cena.