Giselle Ojeda y Javier Salas, de Buenos Aires, tardarán 10
años en recorrer el planeta con esta iniciativa. Armaron una red de contactos
global a favor del uso de las bicis.
Giselle y Javier son pareja, y en lugar de elegir una vida
serena en Buenos Aires, decidieron ser nómades. Viajan por el mundo con un
tráiler en el que llevan una carpa, dos cocinas, bolsas de dormir térmicas y un
equipo de supervivencia, entre otros elementos.
Ahora están en Córdoba para colaborar con la institución
Biciurbanos en la promoción del uso de este medio de transporte sustentable.
Quieren crear conciencia sobre la necesidad de reducir la contaminación y
avanzar en políticas que sumen infraestructura y seguridad para los usuarios de
bicicleta.
Giselle es preparadora física, y dice que aunque es
importante tener buen estado para hacer esta travesía, “el 80 por ciento lo
hace la cabeza”.
Javier colaboró con el diseño de las bicisendas de Buenos
Aires –entre otras del mundo- y asegura que el proyecto funcionó muy bien
porque se hicieron cientos de kilómetros de estas vías.
Más información: lavoz
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